ARTÍCULO 3: EL ANTES, DURANTE Y DESPUÉS DE UN COMPETIDOR DE KARATE-DO

TESINA DE 5º DAN DE KARATE-DO

JESUS JUAN RUBIO

El antes, durante y después de un competidor DE KARATE-DO

PROLOGO

         A la hora de realizar este trabajo pasan por mi mente muchos momentos

vividos en este camino de la vida que es el Karate-do, momentos tristes y alegres, sacrificios, grandes logros y algunas decepciones, todos ellos inolvidables ya que han ido enriqueciendo y forjando mi personalidad;  la mía y la de muchos compañeros, rivales y sobre todo amigos, amigos con mayúsculas, pues en esta gran familia que es el Karate al final solo quedan los recuerdos y las personas que forman parte de ellos, en definitiva un grupo de “locos” que abanderan una sola idea sin pedir nada a cambio salvo la satisfacción del trabajo realizado. Esa idea que compartimos es:

“SUPERARSE DIA A DIA”

-Jesús Juan Rubio-

.- INTRODUCCION -.

         En este trabajo pretendo analizar el comportamiento de un competidor

de Karate desde el inicio de su aprendizaje hasta el final de su vida deportiva, así como la influencia de esa etapa en su comportamiento y el desarrollo de su personalidad.

Debido a su naturaleza, el ser humano lucha desde el momento en que nace,  lucha por conseguir comida, por conseguir calor y protección, todo ello de forma instintiva y con la única referencia de sus progenitores, pero poco a poco la dependencia paterna se diluye en pocos años tomando el niño las riendas de sus actos, (permanentemente vigilado)  tomando decisiones propias, relacionando todas las situaciones, (causa-efecto) completando así las etapas de su iniciación a la vida. Aproximadamente a los 4 ó 5 años se incorpora una nueva forma de aprendizaje, aparece el grupo (preescolar, colegio) donde la convivencia y la disciplina se conjugan con el guía (profesor) que coordina todos los juegos, actos y nuevas experiencias, ese guía ya no abandonará nunca al niño en todas las etapas de aprendizaje y preparación. En esta vorágine de cambios se impone que el individuo eduque y prepare sus músculos, tendones y articulaciones para un crecimiento coordinado (cuerpo-mente). Paralelamente y hasta llegar al colegio los juegos ya han empezado a formarnos  dando los primeros pasos a la coordinación, fuerza y habilidad siendo todos estos conceptos necesarios para afrontar el siguiente escalón:

La disciplina de grupo

El aprendizaje organizado-guiado.

ANTES

Entrega cinturón blanco amarillo 1977

         Cuando un individuo se presenta en un gimnasio de Karate no lo hace con la predisposición de medirse ante nadie, sino la de aprender un arte marcial desconocido y misterioso del cual no tiene muchas referencias. La diferencia de las artes marciales con los deportes más convencionales (fútbol, baloncesto, tenis, etc.….) es que su fin no es superar ni ganar a nadie, sino superarse a uno mismo, aunque la competencia con los demás individuos surge con la práctica diaria siendo la rivalidad por destacar y mejorar su rendimiento lo que hará que obtengamos paulatinamente las metas (grados) que nos indica con sus enseñanzas el Maestro. Durante este proceso de preparación global del cuerpo, el cual va adquiriendo destreza y coordinación consiguiendo finalmente la confianza necesaria para realizar movimientos cada vez mas complejos, nuestro horizonte se va ampliando y alcanza ya a los compañeros de grupo que están más avanzados y se miden en competencias cada vez más selectivas de forma que nos preparamos para el siguiente escalón que no difiere mucho del que intentamos abandonar, con la única diferencia que los objetivos empiezan a estar fuera del gimnasio y con compañeros de otros dojos, ciudades y quizá otros países y culturas….

            Durante esta etapa el individuo y el grupo se funden en un objetivo común: DESTACAR POR ENCIMA DEL RESTO. Este sentimiento no es negativo, por el contrario consigue que cada día aumentemos nuestro rendimiento y por lo tanto nuestra destreza y autoestima.

DURANTE

        Quizás es la etapa más intensa, dura, excitante y satisfactoria de las tres que contempla este trabajo, en dicha etapa se despiertan numerosos aspectos de la personalidad que hasta ahora permanecían latentes pero ocultos, dichos aspectos son:

COMPAÑERISMO, AGRESIVIDAD, CONTROL MENTAL, DISCIPLINA Y HUMILDAD.

Estas actitudes no se pueden ordenar de mayor a menor importancia o viceversa, sino que están interrelacionados y actúan de forma conjunta haciendo que el individuo obtenga un mayor rendimiento de su trabajo diario. Teniendo en cuenta que cuanto mayor sea su esfuerzo por mejorar día a día tendrá un mayor control de  estas cualidades, indispensables todas ellas para un competidor de Karate-Do.

Final por equipos Campeonato del Mundo 1992

A continuación hago una definición libre de estos conceptos para que su significado esté dentro de este contexto.

DISCIPLINA: Cualidad que educa al cuerpo y a la mente en una comunión perfecta para un aprovechamiento máximo del rendimiento.

CONTROL MENTAL:   Obliga al cerebro a dar prioridades a los actos positivos bloqueando todo tipo de sensaciones negativas como la inseguridad, miedos, posibles fracasos deportivos, etc.

AGRESIVIDAD: De esta cualidad depende en gran medida el éxito o el fracaso ante cualquier acción que emprendamos. La dosis justa es suficiente para obligar al contrario a perder confianza y un exceso de agresividad nos bloquearía  provocando el fracaso.

COMPAÑERISMO: Aunque es un deporte tremendamente individual es muy importante que el grupo (Gimnasio, Equipo, Selección, etc) esté unido puesto que de esa forma se suman todas las influencias positivas para que cada uno adquiera la confianza suficiente en su proyecto individual.

HUMILDAD: Dentro de un colectivo no todos son excelentes competidores, pero si deben tener un fin común que haga de nexo de unión entre todos ellos. Este concepto es la humildad que hace que los más hábiles (líderes) guíen al resto del grupo sin imponer ningún criterio de selección ya que éste solamente serviría para dividir el grupo y por ello disminuiría el potencial del equipo.

Con independencia del momento y/o nivel de competición que esté viviendo el deportista su entrenamiento y estos aspectos serán los que marcarán su destino en su vida deportiva.

DESPUES

1996

Una vez acabada la etapa de competición nos damos cuenta que en realidad no ha acabado nada, sino que estamos empezando una nueva etapa igual o más dura que nuestros principios o que nuestra etapa de competición.

En este periodo que se abre empezamos con los mismos miedos que al comenzar nuestra andadura en el karate pues de pronto nuestros objetivos, referencias y metas han cambiado drásticamente, de forma que hay un periodo de tiempo (el principio de la jubilación deportiva) en el que permanecemos desorientados.

Durante esta transición es importante que nuestro Maestro nos guíe de forma que actuemos de forma racional pues con la perdida de objetivos la motivación también decrece por lo que existe el riesgo del abandono de la actividad.

La adaptación a esta etapa se descubre desde dentro del individuo pues hasta este momento todos los estímulos provenían del exterior, (cinturones de colores, competiciones, etc.) ahora la práctica guiada ha de llevar consigo otro tipo de estímulos que vayan formando a un ex-competidor con un régimen muy alto de disciplina y determinación para convertirlo en un karateca íntegro, no quiere decir esto que la disciplina solamente se adquiera dentro del ámbito de la competición sino que en esta etapa tan intensa se adquieren unos valores que si se canalizan hacia el exterior son el soporte de un individuo en su vida cotidiana.

En esta etapa (la más larga de las tres) se conjugan las dos anteriores pues volvemos a sentir los estímulos de nuestros primeros pasos en Karate así como la competitividad existente en el mundo real fuera de las competiciones que hasta ahora llenaban todas nuestras expectativas. Es por todo ello que si nuestro aprendizaje en este arte marcial ha sido satisfactorio aunque nuestro rendimiento deportivo no haya tenido el 100% de éxito, es seguro que con el abandono de la práctica deportiva no solamente no perderemos el rumbo, sino más bien por el contrario aplicaremos esas enseñanzas en este nuevo sendero que se abre ante nosotros.

EL MAESTRO

         Solamente hay una figura aparte de nosotros mismos que influye activamente en las tres etapas anteriormente descritas:

EL MAESTRO

En nuestra primera etapa consigue transmitir los primeros conceptos de este arte marcial, se acerca a ti, te hace sentirte bien con lo aprendido y das lo mejor buscando su aprobación ya que careces por ti mismo de criterio. En estos primeros pasos comienza a forjarse una relación hombre-niño que difícilmente se puede explicar ya que la única referencia hasta el momento con personas adultas es con vínculo paterno o familiar siendo estas últimas de diferente patrón al descrito en estas páginas.

En la segunda etapa es la persona más importante dentro del ámbito deportivo - por encima de los propios torneos - ya que gran parte del éxito depende del tandem formado por maestro-deportista; esa interrelación puede llegar a ser invencible.

En la tercera etapa es la de más responsabilidad por parte del maestro ya que una vez acabada la vida deportiva nos debe orientar a nuevos objetivos      – docentes, personales, de investigación, etc.- que satisfagan nuestro alto grado de exigencia personal.

Epílogo:

La mejor lección que he aprendido a lo largo de tantos años de práctica del Karate-Do es que el tiempo es relativo, los tres primeros años hasta conseguir el 1º DAN de Karate, los últimos treinta segundos de un combate, o el tiempo que empleas en perfeccionar un movimiento.

SEGUNDOS, MINUTOS, HORAS, MESES, AÑOS........, unidades de tiempo con un mismo significado:

Cada momento que vivimos con el Karate,

el Karate alimenta nuestro espíritu.

NOTA: Todo lo expuesto en este trabajo  lo he vivido en primera persona excepto lo ocurrido en la tercera etapa pues todavía se está abriendo a mis ojos………

JESUS JUAN RUBIO

                             

 Jesús Juan Rubio

 5º Dan de Karate
Campeón del Mundo de kumité

CURRÍCULUM DEPORTIVO

TRAYECTORIA DEPORTIVA

1983 - 1994 Componente del Equipo Nacional de Karate

30 veces Campeón de Madrid (Equipos, Individual y Open)

25 veces Campeón de España (Equipos, individual y Open)

 5  veces Campeón de Europa (Equipos e individual)

2 veces Campeón del MUNDO – 1992 (Equipos e individual)

Medalla de Oro al Mérito Deportivo por la  F.M. K. (1995)

Medalla de Plata de la Real Orden del Mérito Deportivo C.O.E (1993)




TITULACIONES

1987.- Entrenador Nacional de Karate por la F.E.K.

 1995.- Entrenador Nacional de Defensa Personal

 2004.- Juez del Tribunal Nacional de Grados de la F.E.K.

 2009.- Cinturón Negro 5º DAN de Karate-Do

 2012.- Cinturón Negro 6º Dan HAYASHI-HA SHITORYU KAI

"La mayor satisfacción como PROFESOR DE KARATE es el respeto mutuo que se establece entre el profesor y el alumno dentro y fuera del dojo."